El vocablo sacramento en primer lugar es referido al uso latino de Sacramentum, en donde la raíz Sacr expresa una relación con lo divino, sacrum de pertenencia a los dioses y es defendido como propiedad suya y mentum es referido al medio o instrumento; entonces referiremos la palabra sacramentum al medio por el cual algo se hace sagrado. De este modo el uso de este vocablo en sus inicios latinos nos lleva a designar dos clases de cosas:
1) el juramento unido a un sacratium y que obliga a quien lo emita
2) la fianza que se deposita en un pleito civil y que sirve de garantía en el momento de la resolución del mismo.
Tertuliano va a emplear la palabra sacramento referenciada al vocablo griego mysterium, empleada por san pablo en el nuevo testamento y que significa “un plan secreto para conseguir un gran bien”. En el mundo cristiano y particularmente el católico, concebimos los sacramentos como signos sensibles y eficaces de la gracia, instituidos por Jesucristo, a fin de santificar nuestras almas, tal como dijo el profeta Isaías: “sacareis agua con gozo de las fuentes del salvador” (ISAIAS 12,3). Así, encontramos en primer lugar que El sacramento es un símbolo, un signo, puesto que representa el actuar de Dios; de este modo ya San Agustín lo relaciona a un signo al afirmar: “sacramentum id est sacrum signum" (De civitate Dei, 10,5: PL 41, 282). Es así como en el antiguo testamento un sin número de signos van a prefigurar los sacramentos instituidos por Cristo en el nuevo testamento, de tal forma que algunos signos por medio de los cuales Dios entabla una especie de pedagogía para darse a conocer a los hombres podrían llamarse sacramentos, como por ejemplo; el cordero pascual, las aguas del diluvio, el pan y vino de melquisedec etc., son muestra de signos que van a prefigurar la gracia que ha de venir con Jesús, quien dará plenitud a los sacramentos de la vida cristiana, los cuales son realidad en el mundo actual en medio de la iglesia.
Los sacramentos son signos sensibles por que manifiestan y exteriorizan ante los sentidos una realidad que de otra forma no se puede percibir, es así como Santo Tomas de Aquino expresara; "Las cosas sensibles tienen por naturaleza cierta aptitud para significar los efectos espirituales; pero esa aptitud propia y natural es determinada a significar algo concreto por institución divina”. (Suma Teológica III, q. 64, art. 2) . Los sacramentos son eficaces por que transmiten la gracia dada por Cristo, teniendo un actuar en la vida del cristiano que los recibe con fe, estos sacramentos transmiten la gracia santificante, junto con una gracia especial que es propia de cada sacramento que añade a la gracia santificante un cierto auxilio divino con el fin de obtener el fin particular de cada sacramento.
Además, han sido instituidos por Jesús, ya que El mismo es signo visible del padre; “ quien me ve a mi, ha visto al padre “ ( JUAN 14,9 ), por lo que Jesús es por si mismo sacramento del padre y a su vez El mismo recurre a multitud de signos con los cuales transmitía su poder y la gracia a los hombres; de este modo se reconoce en la persona de Jesús el origen de los Sacramentos cristianos del Nuevo testamento y estos signos vividos por el señor son de igual modo acogidos por la iglesia, así, cuando Jesús es bautizado en el Jordán, cuando instituye a los apóstoles, cuando celebra la ultima cena, cuando santifica la unión de los esposos en galilea… todos estos acontecimientos los reconoce la iglesia bajo 7 sacramentos, ante lo cual dice el magisterio; «Si alguien dijere que los sacramentos de la Nueva Ley no fueron instituidos por nuestro Señor Jesucristo, o que son más o menos de siete, sea anatema». (Concilio Tridentino, sesión VII, canon 1. (D. 844). Estos sacramentos están presentes en todas las etapas de la vida del hombre y los podemos clasificar asi:
1 SACRAMENTOS DE INICIACIÓN:
• En su nacimiento: Bautismo
• En su crecimiento: Confirmación
• En su alimentación: Eucaristía
2 SACRAMENTOS DE CURACION:
• En las heridas del pecado: Reconciliación
• En la enfermedad: Unción de los enfermos
3 SACRAMENTOS AL SERVICIO:
• En la formación de un hogar: Matrimonio
• En la consagración al servicio de la comunidad: Orden Sacerdotal
Esta presencia permanente de Jesús en nuestras vidas se hace visible en medio de la iglesia particularmente en la vivencia de los sacramentos, por tanto así como Jesús es signo visible del Padre, la iglesia a su vez es signo de Cristo en medio de los hombres
"Cristo está siempre presente en su Iglesia, sobre todo... está presente con su fuerza en los Sacramentos" (Vat. II, S.C.7).
Para realizar estos sacramentos se necesitan dos cosas:
1. La forma: oración o palabras que se pronuncian al administrar el sacramento
2. La materia: lo que se usa para el sacramento: el agua, el pan, el vino, el aceite, la imposición de manos, la confesión de una culpa.
Y de parte de los fieles que se acercan a recibirlos, se requiere;
1. Tener fe
2. Conocer lo que se comunica
3. Quererlo recibir
1) el juramento unido a un sacratium y que obliga a quien lo emita
2) la fianza que se deposita en un pleito civil y que sirve de garantía en el momento de la resolución del mismo.
Tertuliano va a emplear la palabra sacramento referenciada al vocablo griego mysterium, empleada por san pablo en el nuevo testamento y que significa “un plan secreto para conseguir un gran bien”. En el mundo cristiano y particularmente el católico, concebimos los sacramentos como signos sensibles y eficaces de la gracia, instituidos por Jesucristo, a fin de santificar nuestras almas, tal como dijo el profeta Isaías: “sacareis agua con gozo de las fuentes del salvador” (ISAIAS 12,3). Así, encontramos en primer lugar que El sacramento es un símbolo, un signo, puesto que representa el actuar de Dios; de este modo ya San Agustín lo relaciona a un signo al afirmar: “sacramentum id est sacrum signum" (De civitate Dei, 10,5: PL 41, 282). Es así como en el antiguo testamento un sin número de signos van a prefigurar los sacramentos instituidos por Cristo en el nuevo testamento, de tal forma que algunos signos por medio de los cuales Dios entabla una especie de pedagogía para darse a conocer a los hombres podrían llamarse sacramentos, como por ejemplo; el cordero pascual, las aguas del diluvio, el pan y vino de melquisedec etc., son muestra de signos que van a prefigurar la gracia que ha de venir con Jesús, quien dará plenitud a los sacramentos de la vida cristiana, los cuales son realidad en el mundo actual en medio de la iglesia.
Los sacramentos son signos sensibles por que manifiestan y exteriorizan ante los sentidos una realidad que de otra forma no se puede percibir, es así como Santo Tomas de Aquino expresara; "Las cosas sensibles tienen por naturaleza cierta aptitud para significar los efectos espirituales; pero esa aptitud propia y natural es determinada a significar algo concreto por institución divina”. (Suma Teológica III, q. 64, art. 2) . Los sacramentos son eficaces por que transmiten la gracia dada por Cristo, teniendo un actuar en la vida del cristiano que los recibe con fe, estos sacramentos transmiten la gracia santificante, junto con una gracia especial que es propia de cada sacramento que añade a la gracia santificante un cierto auxilio divino con el fin de obtener el fin particular de cada sacramento.
Además, han sido instituidos por Jesús, ya que El mismo es signo visible del padre; “ quien me ve a mi, ha visto al padre “ ( JUAN 14,9 ), por lo que Jesús es por si mismo sacramento del padre y a su vez El mismo recurre a multitud de signos con los cuales transmitía su poder y la gracia a los hombres; de este modo se reconoce en la persona de Jesús el origen de los Sacramentos cristianos del Nuevo testamento y estos signos vividos por el señor son de igual modo acogidos por la iglesia, así, cuando Jesús es bautizado en el Jordán, cuando instituye a los apóstoles, cuando celebra la ultima cena, cuando santifica la unión de los esposos en galilea… todos estos acontecimientos los reconoce la iglesia bajo 7 sacramentos, ante lo cual dice el magisterio; «Si alguien dijere que los sacramentos de la Nueva Ley no fueron instituidos por nuestro Señor Jesucristo, o que son más o menos de siete, sea anatema». (Concilio Tridentino, sesión VII, canon 1. (D. 844). Estos sacramentos están presentes en todas las etapas de la vida del hombre y los podemos clasificar asi:
1 SACRAMENTOS DE INICIACIÓN:
• En su nacimiento: Bautismo
• En su crecimiento: Confirmación
• En su alimentación: Eucaristía
2 SACRAMENTOS DE CURACION:
• En las heridas del pecado: Reconciliación
• En la enfermedad: Unción de los enfermos
3 SACRAMENTOS AL SERVICIO:
• En la formación de un hogar: Matrimonio
• En la consagración al servicio de la comunidad: Orden Sacerdotal
Esta presencia permanente de Jesús en nuestras vidas se hace visible en medio de la iglesia particularmente en la vivencia de los sacramentos, por tanto así como Jesús es signo visible del Padre, la iglesia a su vez es signo de Cristo en medio de los hombres
"Cristo está siempre presente en su Iglesia, sobre todo... está presente con su fuerza en los Sacramentos" (Vat. II, S.C.7).
Para realizar estos sacramentos se necesitan dos cosas:
1. La forma: oración o palabras que se pronuncian al administrar el sacramento
2. La materia: lo que se usa para el sacramento: el agua, el pan, el vino, el aceite, la imposición de manos, la confesión de una culpa.
Y de parte de los fieles que se acercan a recibirlos, se requiere;
1. Tener fe
2. Conocer lo que se comunica
3. Quererlo recibir
Todas estas ideas las resume maravillosamente el concilio Vaticano II al decir que: “Los sacramentos están ordenados a la santificación de los hombres, a la edificación del Cuerpo de Cristo y, en definitiva, a dar culto a Dios; pero, en cuanto signos, también tienen un fin pedagógico. No sólo suponen la fe, sino que, a la vez la alimentan, la robustecen y la expresan por medio de palabras y cosas; por esto se llaman sacramentos de la fe.
Confieren ciertamente la gracia, pero también su celebración prepara perfectamente a los fieles para recibir fructuosamente la misma gracia, culto a Dios y practicar la caridad
Por consiguiente, es de suma importancia que los fieles comprendan fácilmente los signos sacramentales y reciban con la mayor frecuencia posible aquellos sacramentos que han sido instituidos para alimentar la vida cristiana.” (Sacr. Con. 59).
Confieren ciertamente la gracia, pero también su celebración prepara perfectamente a los fieles para recibir fructuosamente la misma gracia, culto a Dios y practicar la caridad
Por consiguiente, es de suma importancia que los fieles comprendan fácilmente los signos sacramentales y reciban con la mayor frecuencia posible aquellos sacramentos que han sido instituidos para alimentar la vida cristiana.” (Sacr. Con. 59).